Viajar con niños : En estos días de vacaciones son muchos los que se desplazan y viajan con niños en diversos medios: el propio coche, autobuses, tren o avión. Habitualmente suelo viajar en tren al menos una vez al mes y no sé por qué, pero atraigo hacia mí a los niños. En muchas ocasiones, las familias cuidan este momento y el viaje se les hace llevadero a ellos… y a los demás, pero en otros casos, no se tienen en cuenta unas mínimas recomendaciones y entonces todos padecemos un viaje… incómodo.
Les podría contar numerosas anécdotas e incidentes vividos con niños, porque como les digo, suelo atraerlos y raro es el viaje que no me toca su compañía. Las patadas en las piernas son habituales cuando los asientos son enfrentados, los chillidos, llantos, el ruidito de las maquinitas…
Por supuesto, me han manchado la camisa, el pantalón o el pelo de batido de chocolate, cola, agua, helado… Pero son niños y a ellos todo se les perdona. Lo que no entiendo es la actitud de sus padres que literalmente se desentienden y en muchos casos no piden disculpas o intervienen.
Estas son mis recomendaciones para prevenir un viaje con niños:
- Si vamos a viajar en un transporte público tenemos que supervisar a los niños y tenemos que implicarnos en que no molesten a los demás pasajeros. Si lo hacen, también debemos pedir disculpas... casi siempre somos comprensivos.
- En cualquier caso, sea transporte público o propio, debemos tener previsto cómo entretener al niño, sobre todo si el viaje va a ser largo. Además, debemos de llevar un "buen arsenal" de entretenimiento, porque los niños, ya sabemos, que se cansan de todo pronto. Algunas opciones son:
- Una bolsita con algunos juguetes pequeños para entretenerse: algunos muñecos, cochecitos...
- Varios cuentos o libros con imágenes.
- Un libreto de dibujos para colorear y lápices de colores; mejor lápices que rotuladores o acuarelas. -
- Puzles pequeños.
- Un reproductor de MP4 o similar con canciones infantiles o cuentos que se pueden escuchar, siempre con auriculares para no molestar a los demás pasajeros.
- Otra buena opción es un reproductor de DVD portátil. Si viajamos en tren o en avión, con auriculares, para no molestar.
- Si vamos en transporte público tenemos que cuidar el momento en que demos de comer al niño. Lo mejor es que esté con nosotros y lo controlemos. Dejar solos y con un acompañante extraño, a niños pequeños con el batido o las galletas de chocolate, el sándwich de mermelada que sobre sale o la latita de refresco, es ganas de amargar el viaje a cualquiera. En estos momentos nos tenemos que hacer responsables del niño.
- Si el viaje se hace en vehículo propio, hay que hacer descansos cada cierto tiempo. En primer lugar, por la seguridad del conductor y por otro lado, para evitar el cansancio del niño. En un momento en el que hay que evitar que su mal comportamiento sea el que nos obligue a parar, porque ya no puede más.
En cualquier caso, viajar es una experiencia agradable para los niños y es un momento que une más a la familia. Aprovéchenlo. Nosotros nos tomaremos unos días de descanso, por ese motivo, no responderemos a los comentarios hasta el día 5 de abril. Pero a partir de esa fecha, intentaré ponerme al día y responder a todas sus consultas. FELICES VACACIONES.
Viajar con niños : Jesús Jarque García. Familiaycole
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